Asuntos jurídicos
Aunque la labor de la OMI se centra principalmente en la seguridad de la navegación y en la prevención de la contaminación del mar, la Organización también ha introducido normas sobre responsabilidad civil e indemnización por daños, ‑como la contaminación‑ causados por los buques.
La catástrofe del Torrey Canyon en 1967, que se tradujo en una intensificación de la labor técnica de la OMI para prevenir la contaminación, también fue el catalizador de la labor en materia de responsabilidad e indemnización. Así, se constituyó un Comité jurídico especial encargado de tratar las cuestiones jurídicas planteadas por la que fue la primera catástrofe importante en el mundo causada por un petrolero, y el Comité pronto se convirtió en un órgano auxiliar permanente del Consejo de la OMI, reuniéndose dos veces al año para tratar todas las cuestiones jurídicas planteadas en el seno de la OMI.
La Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar se ocupa de algunas cuestiones que no están reguladas en los instrumentos convencionales de la OMI, como, por ejemplo, la jurisdicción de los Estados ribereños.